La base psicobiosocial, propone que los factores
psicológicos y sociales favorecen que un individuo genere una tendencia a la
enfermedad o por el contrario se dirija hacia el estado de salud. Esta base se
refiere a lo que llamamos medicina del comportamiento. Esta rama de la
medicina, como nuevo paradigma, reconoce que nuestras pautas de pensamiento y
nuestras emociones pueden representar un papel fundamental en la salud y en la
enfermedad. Expresa que el individuo es capaz, con sus actos y creencias, girar
la balanza hacia un estado u otro según cómo emocionalmente vivan sus vidas.
El Método EICI en
base al trabajo psicobiosocial del individuo, lo acompaña para ampliar la
conciencia más allá de los cuidados tradicionales puramente médicos, para que
la persona dirija su mirada a su cuerpo,
a sus emociones, a sus sensaciones, sus síntomas y a las señales que su organismo
le expresa.
Esto conlleva a un
formato participativo haciendo que el individuo genere un cuidado
autoresponsable con lo que es y lo que le ocurre.
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